Cuando no se "juega bonito": Las malas costumbres en el futbol

Platicando con un cuate por el msn, hablábamos sobre cuando se pierde la verdadera escencia del fútbol; lo que me refiero es cuando intentan hacer artimañas sucias y estrategias que no buscan mejorar su equipo, sino "chingarse a la mala" al otro.

Y lo malo es que estas artimañas se aprenden desde las categorías infantiles.

He escuchado de diferentes maneras para buscar el juego sucio. Mi cuate me decía que en el deportivo a donde vá (en el D.F.), hay equipos de futbol infantiles, en los que la estrategia consiste en las patadas. Sí señores, en las patadas. Con el propósito de hacer daño a los jugadores talentosos del equipo contrario. Al principio como que no me la creía, pero por lo que he visto en los partidos infantiles, la verdad no me sorprende que lo que hacen.

Otro punto de juego sucio, ese que demerita el futbol en sí, son los constantes e innecesarios reclamos. Está bien que un jugador, entrenador, padre de familia, espectador, etc. haga un reclamo, un "gesto de inconformidad" al árbitro sobre una jugada. Eso es bastante normal. Lo malo, es cuando ya se hace una costumbre; cuando por cada faltita busques el intimidar al árbitro para:

• Ganar tiempo (generalmente cuando vas ganando, y querer terminar el partido rápido).
• Pedir tarjetas (a cada faltita, pedir una tarjeta para el infractor; sabiendo que el árbitro es el que toma la desición final)
• Simplemente buscar una falta (Este es uno de los peores de todos, puesto que en la mayoría de las veces, ni la falta existe).

Un jugador que tiene en sus características todos estos puntos que acabo de mencionar es Cuauhtemoc Blanco. Por desgracia también se ha dado a conocer por sus consistentes reclamos; y no me sorprende que haya jugadores que lo imiten en su manera de jugar (que también por desgracia, quieran copiar lo malo de él).


En el juego colectivo, cuando un partido es importante, los equipos buscan tomar la estrategia de "la pérdida de tiempo" cuando van ganando. Me tocó dirigir un partido de éstas características. Y hay unas estrategias bastante interesantes (y a la vez sucias) que los jugadores utilizan para hacer tiempo:

1) Principalmente los porteros son los que pierden tiempo. En los saques de meta buscan ganar el mayor tiempo posible; el retener demasiado el balón en sus manos se puede marcar infracción (más de 6 segundos en sus manos). Y estos argumentos se sanciónan con una tarjeta amarilla al guardameta. Que en algunas ocasiónes es capaz de negociar esa tarjeta para perder tiempo.

2) Los jugadores también tienen lo suyo. Cada interrupción del juego lo ven como una oportunidad para perder tiempo. Los jugadores utilizan diferentes técnicas

• Mover el balón lejos del lugar de la falta cometida (Eso es una tarjeta amarilla automática).
• Perder tiempo en el saque de banda (tomar el balón, y antes de sacar el balón, llamar a un compañero para que él haga el saque).
• El ir excesivamente lento cuando un jugador tiene que ser sustituído.
• El "fingir" estar lesionado (Este es un punto sensible, puesto que en algunas ocasiónes, sólo el jugador sabe si en verdad está lesionado o no; pero de todos modos el tiempo se pierde).
• Realizar sustituciónes en los últimos minutos (generalmente en los de reposición).

Pero está a disposición del árbitro agregar el tiempo que él considere necesario en la reposición.

Al término del partido tuve una charla con el entrenador del equipo que realizó esas artimañas en el partido (que por cierto, ganó). Y le explicaba sobre las malas costumbres en el futbol. Esto realmente deteriora el juego, lo vuelve peligroso, ríspido. Y si no se quitan esas acciónes desde los amateurs (cabe decir que la categoría del partido era de 16 a 18 años), se va a seguir así para los niños. Poniendoles un mal ejemplo.

El entrenador estuvo de acuerdo conmigo; no crean que me dijo "Disculpe, no lo volveré a hacer". Puesto que eso sería infantil. Aunque deberían los entrenadores preservar ante todo las buenas costumbres en la cancha.


Bueno, eso es todo, Hasta la Próxima!